Volvió la comunidad mancomunada de manicomniados entumecidos con las patas escarchadas!

31 diciembre 2005

Reflexiones pre 2006

Hace un rato miraba con atención una mosca. Ella tenía los ojos rimbombeantes de alegría, por lo que deduje que quizás las moscas también celebran el año nuevo. Por esto, me acerqué lentamente para que no escapara y le pregunte con tono militar mirándola a los millones de ojos q tenía: -oye mosquita, cómo celebran el año nuevo uds. Y bueno, ella juntó sus manos y como que se las frotaba, parecía preparar un ataque, o más bien hacerme burla. Además también se saboreaba. ¿Qué habrá querido demostrar con eso?, algún día descubriré q mierda simboliza una mosca frotándose sus manos---



Pa’ mi que las moscas se traman algo pa’ mañana en la noche, lo intuyo…Entonces yo, como buen servidor de mi patria, busqué un matamosca de mi colección -cabe señalar q poseo varios (si hay gente que colecciona estampillas por qué yo no puedo coleccionar matamoscas? Cada uno colecciona lo que quiere, inclusive he escuchado de seres q coleccionan vaquitas de tierra pero eso es otro tema). Ahora bien, a lo que iba… la cosa es q agarré el matamosca y le di un ultimátum a mi víctima.: -oye mosca reculiá (sic) o me dices por qué rechucha estás tan feliz o te mato… ….la maté

Tarea pa’ la casa:

¿Las moscas no hablan, o no celebran el año nuevo? ¿ah?


Chyalo

30 diciembre 2005

Reflexiones bajo la Ducha


Esta mañana, como todas las mañanas (a veces y en función de la ocasión también por las tardes e incluso noches) me he duchado.

Mientras tralalí tralalá me enjabonaba bajo la alcachofa tarareando una de Elvis, he resuelto someter a inspección mi atlética figura para ver cómo le iban sentando los años.

De pena.

No. Pero lo realmente interesante de mi escrutinio ha sido el increíble hallazgo de descubrir que soy una especie de alfombra bípeda y semoviente.

Me explico.

En la cabeza, pelo. En la cara, a parte de cejas y pestañas, algo de pelo que crece sin que lo llame, en la cara, en forma de barba (que me afeito), que nunca sabré para que cresta crece pues no sé la función que cumple. En el torso, pelo, mogollón de pelo. En el abdomen más pelo, incluso. Las axilas, a reventar de pelo. Los chirimbolos que en exclusiva otorgó Natura a los varones, bien poblados de pelo que tampoco hacen ninguna función aparente. Las piernas, cual lomo de pastor alemán.

Vamos, que los varones (y algunas hembras) estamos de pelo como para regalar. Y que hay quien completa su colección pilosa por la espalda, o incluso por los hombros, ojo.

Y entonces he pensado.

Dado que más de un noventa por ciento de mi superficie anatómica está recubierta de pelo, ya sea cortísimo, corto, o largo, que en nada me distingo pues de cualquier animal (por ejemplo un perro) al que limpiaríamos con champú, y que dado que lo idóneo para el pelo es el referido champú, ¿por qué me enjabono el cuerpo en lugar de enchampuármelo, si valiese el palabro?

Por lo anterior, y a la espera de sus comentarios sobre tamaña cuestión planteo las siguientes para su deliberación y respuesta

1..- ¿No deberíamos los varones adultos entregarnos en nuestra higiene diaria al champú en sustitución del más inadecuado jabón?

2.- ¿Alguien sabe qué utilidad tiene el vello del pubis, o del pecho pongo por ejemplo?. ¿Para qué demonios crece con la poca falta que hace y lo feo que también hace?. ¿Y el de la cara?

3.- Las que ustedes quieran

Nico

25 diciembre 2005

JM*2022

Sí, allá casi 16 años de que nuestro candidato asuma la presidencia de la república, y considero un tiempo distante prudente como para plantear el por qué he de ser nombrado ministro de obras públicas y administrador del zooministerio (ex ministerio de ganadería)

La idea de mis ministerios es involucrar en una ciudad la apacibilidad de los animales (sin terno) junto con la majestuosa arquitectura capitalina, la cual siempre se está construyendo -es de esperar que por lo menos para nuestro gobierno la Av. Gral. Velásquez por fin esté terminada...(por poner un ejemplo) y no nos sigan ¿atormentando? las grúas torres q sobrepoblan la ciudad-. entre las medidas más importantes consigno las sgts:

1.- Gremialización de las granjas, además de trabajar íntimamente asesorado por vacas o en su defecto por lagartijas.
2.- Construir la grúa-torre más alta del mundo, la cual será ubicada sobre la, para esa fecha devastada, torre Entel.
3.- Colgaremos de cada ceda el paso una gallina, para que cacaree cuando los autos se acerquen a él y así no puedan evitar verlo.
4.- Se construirán catapultas en cada campus universitario, desde las cuales se arrojaran chanchos a todo aquel que intente ingresar a la U por la fuerza.
5.- Cada nuevo edificio contará con cimas similares a las cordilleranas para q los cóndores bajen a la cuenca santiaguina y podamos cazarlos despiadadamente sin compasión (por cada 5 cóndores recibirás un "escuter" de regalo).
6.- Haremos cada año la “fiesta del conejo reproductor” en la plaza de la constitución. Ahí se creará el gran centro del sexo animal, los conejos q en grado de parentesco lleguen mas rápido a los 200, desde el abuelo hasta el último nieto, recibirán de regalo una zanahoria redonda con forma triangular (aunque de lejos parezca cuadrada).

Esto es sólo un acápite de las tantas ideas q convertirán a Santiago en el núcleo de la verdadera convivencia entre las obras públicas y el desarrollo sustentable animal.

Chyalo

22 diciembre 2005

Absurdo Cultural Ilusional

¿Podemos estar seguros de que lo que vemos no es ilusión?

A simple vista lo que usted esta viendo en este preciso instante es una hoja de papel con un puñado de signos que intentan esgrimir algo. Si bien lo anterior, de algún modo, es cierto, estamos intrínsicamente concientes de que lo consideramos así porque la cultura que hemos adoptado nos condiciona a creer en ello. Sin embargo, ¿podemos estar tan seguros de que verdaderamente lo es?, ¿puede ser todo esto una vil ilusión nuestra?, y yendo un poco más al meollo del asunto, ¿qué es realmente una ilusión?

Pues bien, es necesario aclarar el concepto fundamental sobre el cual fluctúa mi ensayo: ilusión.
Ilusión es, según la real academia española de la lengua, un concepto, imagen o representación sin verdadera realidad, sugeridos por la imaginación o causados por engaño de los sentidos. Otra definición sería decir que es todo lo que refiere a cualquier distorsión de una percepción sensorial y que cada uno de los sentidos del cuerpo humano puede ser afectado por ilusiones.
Ahora bien, descartamos como ilusión entonces todo aquello de lo cual la comunidad en sí lo acepta y que considera real. En esta dirección cualquier perturbación a los sentidos que no sea entendida por un grupo mayor de personas equivaldría a hablar de ilusión. Salir a caminar y que un perro nos hable obviamente es un desvarío del sentido auditivo, puesto que es comúnmente aceptado que los perros evidentemente no hablan, y yendo aun mas allá, se podría decir que no es ilusión todo aquello que la ciencia -entiéndase como todo conocimiento basado en razones sólidas, y como proceso de investigación a través del cual se establecen nuevas verdades relativas- demuestra lo contrario.
De esta forma caemos en que el concepto de ilusión estaría directamente relacionado al de realidad. Pero he aquí una nueva duda pletórica, ¿qué es la realidad?.

Pues bien, la realidad entendida desde un punto de vista positivista es una sola y objetiva. Con los parámetros actuales podemos refutar la afirmación anterior y no guiarnos por esa antigua concepción decimonónica. Debemos hablar ahora de realidades.

Al hablar de realidades se nos amplia aún más nuestro campo de desarrollo, ya que evidentemente es un concepto sumamente discutible. Desde mi punto de vista, es tan real el viejo pascuero que vive en la mente de un niño sin siquiera ser avalado por la ciencia, hasta que yo esté vivo -aunque bien es cierto que si filosofamos al respecto quizás no lo esté, y que todo lo que yo estoy redactando ahora sea sólo un proyecto “de algún niño extraterrestre que juega conmigo a los humanos”, pero para el efecto lo asumiremos como premisa-.
No podemos hablar de una realidad que guía nuestro andar por este mundo, cada uno percibe cosas distintas. Una vaca ve cosas de vacas y un chanchito de tierra ve cosas de chanchitos de tierra, cada especie en este planeta percibe su realidad de distinta forma. Somos seres únicos e irrepetibles que razonamos de maneras diversas, y nadie podría asegurar que la hoja que usted esta leyendo a continuación para todas las culturas sea la misma hoja. Quizás para un niño esta hoja no sea más que un futuro barco de papel y que para otro sea un proyectil en dirección de un compañero de curso. Para un poeta puede ser el futuro receptor de un escupo de creatividad en algún citadino bar, para un animal hambriento, quizás el olor de la tinta impresa aquí, le atraiga y no dude echárselo a la boca creyendo que es comida, o quién sabe, hasta incluso puede ser un trabajo para la universidad… A lo que voy es a que las percepciones de la realidad son distintas, cada uno entiende a su manera el mundo, sus códigos culturales son distintos al momento de enfrentarse ante un objeto que esté en este planeta. Ahora bien de lo que relativamente podemos estar seguros, es que el cohete de papel, el proyectil, el futuro poema, el alimento y el trabajo universitario algo son, y que no es ilusión nuestra el que estén ahí, considerando a la ilusión como algo que no encaja en nuestra realidad. Ergo, para el niño para el que este papel será un futuro barco, no será un trabajo universitario, como para el animal no será un recipiente de un poema.

La ilusión es algo cultural. La intelectualidad la define como falla de los sentidos, pero cómo podemos establecer que realmente esta fallando el sentido que no ve lo que el resto ve, es decir, ¿puede el resto estar equivocado? Entonces, la realidad y la ilusión son tan propias como las ideas que sigo vapuleando a este teclado, y definitivamente no podemos establecer una verdad absoluta sobre qué es y qué no es algo, sí una verdad cultural.

Por todo lo anterior, y aunque suene un poco contradictorio, sí podemos asegurar qué es y qué no es ilusión desde cierto punto de vista, puesto que dicho concepto depende de nuestra realidad, y si para nuestra realidad hay algo que no encaja en nuestra lógica percepción de sentidos, ese algo será denominado definitivamente ilusión. Sin embargo, también podemos estar concientes de que para otra visión de mundo ilusión será creer que ese algo no lo es. Hay que considerar entonces que este trabajo está hecho desde un ser inmerso en una cultura para una misma cultura, desde donde es imposible escapar. Es por esto que mi conclusión apunta hacia que las cosas debemos catalogarlas desde nuestra cultura, valga la redundancia, y practicarlas en función a ella, pues aunque queramos escapar de esto, no podemos.
Ahora bien, es importante hablar del lenguaje como fórmula para evadir la condición de imperfecto que tiene el ser humano al no poder establecer verdades absolutas. Esa fórmula la llamo lenguaje, porque es ahí en donde radica el verdadero cuestionamiento a nuestro existir, el lenguaje es quien sostiene nuestra cultura y es quien nos obliga a cuestionarnos las falencias de ciertos conceptos.

En fin y siendo sucinto, podemos estar seguros de que lo que vemos no es ilusión porque la fórmula, de la que anteriormente hablaba, sostiene nuestras relaciones sociales y solamente para ellas es necesario discutir si ese algo es o no es ilusión. La misma pregunta inicial está enmarcada en una telaraña llamada cultura occidental. Lo que consideramos como ilusión es una invención de ella, y yo siendo parte de la misma, para relacionarme necesito estar sujeto a las premisas que ella misma dicta. En este caso me sujeto a la fuente oficial , y es ella quien me dice que ilusión es todo lo causado por un engaño de nuestros sentidos, y “este papel con tinta es un papel con tinta” porque desde mi cultura occidental su forma contextura y tamaño así lo dice. Por esto y todo lo anterior, puedo concluir que la ilusión no es algo que simplemente es, si no que es algo creado arbitrariamente por nosotros mismos.

Chyalo.

19 diciembre 2005

Rodillos y brochas...

Que curiosa es la vida. Cuando menos lo esperamos te da un golpe de lo mas absurdo. El otro día fui a comprar al supermercado, cerca de mi casa. Justo había unos maestros pintando. Yo caminé relajado por allí, confiado por que no me pasara nada, y por las medidas de seguridad que toman las “grandes empresas” (alias Cencosud) de este país, responsables como en ningún otro lado. Bueno, la cosa es que mientras yo pasaba, a un maestro se le ocurre la genial idea de relajar un poco la muñeca, lo que causo que la brocha que estaba en su mano cayera directamente en mí. Un desastre desastroso, como diría el Chyalo. Ahí reflexioné: “Menos mal que no fue un rodillo”. Jajaja. Me hubiese gustado verme pintado con rodillo y no con brocha ¿Cómo hubiese sido la marca? La brocha dejó un manchón shuuuper loco, pero ¿un rodillo? ¿Qué tipo de marca me hubiese dejado? Quizás hubiese quedado como los indios de rayas, esos que nadie conoce. O bien como esos autos Shuuuuuper flaytes que hay por ahí, con alerón de palo y toda esa parafernalia. No sé. Tal vez en otro momento de mi vida me hubiese ofuscado y habría agarrado coprolálicamente a los pobres tipos arriba del andamio, pero como en estos días estoy extremadamente feliz, lo dejé pasar.

Usted se preguntará, querido y fiel lector a que cresta quiero llegar con todo esto. La verdad es que ni yo mismo lo se; “que absurdo” va a pensar, pero esa es la idea, el absurdo. Eso es lo que quiero demostrar con todo esto, que con que te caiga una brocha en la cabeza, es tan absurdo como inventar que te caiga una brocha, o lo que es peor, inventar un supermercado cerca de mi casa. Aunque lo haya.

15 diciembre 2005

El Cuerpo de lo Absurdo

Se ha dado cuenta usted, gracioso caballero (no por que me cause risa, sino por que tiene gracia, el don) que nuestro cuerpo es de una forma y difícilmente la podemos cambiar, a menos que tengamos mucho dinero, o seamos Michael Jackson (quien tiene mucho dinero), pero en el fondo igual es lo mismo: un fome y aburrido humano, con un aburrido cuerpo. A lo mejor Michael no es fome, puesto que canta y baila como los dioses (si, como los dioses, no como Dios, a quién mencionaré mas adelante). Pero si, su cuerpo no tiene nada de interesante, o me va a decir que tiene algo que lo caracterice y que lo diferencie al resto de los seres humanos? No señor.

Ya en la antigüedad, cuando Dios se sentía superior al resto de los dioses, aquellos que se iban siempre en puros carretes y pasaban tomando, fornicando, y aprovechando todos los placeres olímpicos, decidió crear al hombre, para perpetuar su superioridad. Lo creó “a su imagen y semejanza”[1] para que el hombre supiera de donde proviene. Pero hizo algo mal. Primero, como todos sabemos, creó a los australopitecos, el cual era similar al mono, pero tenía cierta particularidad: NO TENÏA COLA. Es muy sabido, en los ambientes intelectuales y letrados de la humanidad, y también del Olimpo, que Dios se sentía superior puesto que poseía aquel preciado instrumento: la cola. Este elemento es el que diferencia al hombre de Dios, quien desde las alturas, nos saca pica. Nos hizo creer por largos años que aquel elemento diferenciador lo habíamos perdido cuando evolucionamos de los monos, algo completamente errado, puesto que somos una creación aparte e individual del tipo ya mencionado. Sin embargo, es grande el deseo de haber descendido de los monos, por lo que muchos añoramos aquellos tiempos de oro en que éramos chimpancés. Ahora bien, la evolución (para los evolucionistas), nos quitó como especie la cola. Para los dadaístas, o los que creen en dios, el hombre no tiene cola, por que esto demuestra la superioridad del coludo.

Ahora bien, querido lector usted se preguntará ¿Por qué muchos proponemos la necesidad de tener cola? Primero, se ha dado cuenta usted lo molesto que es cuando pica la espalda y no puede rascarse puesto que sus brazos no llegan a ese lugar? Con la cola, esto se acabaría, tendríamos a nuestra colita rascándonos la espalda, o jabonándonosla en aquellos lugares que no llegamos comúnmente. Además, podríamos levantar objetos múltiples. Por ejemplo cuando estamos en aquellos momentos alegres con una cerveza al lado, podríamos tener no solo 2 vasos, sino que 3. Que mejor. O cuando llevamos bolsas, podemos llevar muchas mas de las que comúnmente cargamos. O para rascarnos el poto mientras vamos por la calle, sería ideal, cuando sucede eso es muy incómodo hacerlo con las manos. O en el ámbito sexual, hacerle un “102” a nuestra(s) pareja(s) utilizando la cola.

Ahora bien, el tener cola, no implica tener cualquier cola. No vale tener una cola de chancho, o de perro, las cuales no son útiles a mi propósito. Debe ser una cola sumamente flexible, pero musculosa, capaz de cargar objetos de un peso superior a los 20 kilos. También debe tener un largo de aproximadamente la distancia que hay desde el fin de la columna (o sea, donde empezaría la cola) hasta donde termina la cabeza. Así nos puede ser útil para infinidad de tareas. En todo caso, hablando de la cola, me surge una duda: ¿Cómo tendría que ser la cola? ¿Peluda o Pelada? He decidido, arbitrariamente, que nuestra cola – humana – debe ser con una cantidad de vello similar a los brazos, o como mucho, a las piernas. No vale tener una cola tan peluda como la de los perros, sería desagradable para los que la usarían para prácticas sexuales, además de calurosa en el verano.

Sin embargo, es complejo el uso de cola con pantalones, puesto que debemos hacerle un hoyito a estos últimos. También, la cola debe tener ropa propia, puesto que en el invierno o en días fríos entrarían ráfagas de aire a esta, la que puede resfriarse. La cola, es en el fondo como un brazo mas, por ello hay que tapar su origen, puesto que, quien anda mostrando su axila todo el DIA?? No señores, la cola tiene dignidad y por eso tiene que usar ropa, puede andar de manga corta o manga larga, depende del tiempo.

Otro elemento en nuestro cuerpo que fue creado por aquel tipo llamado Dios, o bien surgió después de nuestra traumante evolución, es el dedo chico del pié. Quizás este elemento es bueno, pero no tiene ninguna utilidad, bueno, si, una. El dedo chico del pié solo sirve para hacernos reír. Me explico. ¿Alguna vez, querido lector, ha analizado seriamente a su dedo chico? ¿Lo ha mirado por largos ratos, hasta darse cuenta de la trascendencia que este tiene? Yo lo he hecho muchas veces y créame, solo me da risa. Esa uña tan pequeña, insignificante, que no sirve para su propósito (el propósito de las uñas es rasguñar, o rascar(se) algo que no puede hacer un dedo chico del pié).Esa cara que tiene – pues el dedo este tiene cara - es tan graciosa como ver a un sumo japonés peleando contra una hormiga de rincón, o en su defecto a una polilla viajando en el ciberespacio. En el asunto de las polillas, como seres humanos necesitamos alas, para no usufructuar más de la buena voluntad que tienen estas famosas polillas para llevarnos a distintos lugares del planeta. Se cansan mucho y a veces perecen en estas empresas. Por ello también necesitamos alas.

Sin embargo, como seres humanos, deberíamos prescindir de un elemento sumamente molesto: la columna vertebral. Esta asquerosidad de elemento, solo nos causa problemas, por ejemplo, cuando viajamos en micro, lo único que hace es estorbarnos y hacer que nos duela la espalda. Por ello, para reducir el sufrimiento, deberíamos tener una columna, pero de resortes, flexible y práctica. Sería genial tener resortes como columna, así podríamos encogernos en situaciones que fuese necesario, o en su defecto, agrandarnos. Por ello postulo que la columna vertebral debe ser desechada de nuestra constitución como seres humanos pseudo racionales.

En mi crítica al cuerpo humano, he decidido, para finalizar, hablar acerca de los pies. Los pies son algo bastante curioso en el ser humano. Si fuesen como las manos, podríamos andar al revés y si caminásemos con estas últimas, tendríamos doble personalidad: dos cabezas, dos caras, etc. Curioso fenómeno que se daría. Además, los pies son algo bastante exótico dentro de los seres humanos. Si tuviésemos patas de pato, sería mas entrete y mas funcional, pero no podríamos usar herraduras. Un importante filósofo dijo la siguiente frase: los zapatos son erraduras.

Los zapatos los usamos a diario. Ergo a diario erramos. 'el ser humano se equivoca'.

Yo le contrarié su afirmación, puesto que el errar es divino, mas no humano. En ese sentido, la evolución es el error más grande que ha cometido el ser mas divino, el hombre.



[1] Biblia, no sé donde.

14 diciembre 2005

QUÉ ES LO ABSURDO

QUÉ ES LO ABSURDO


Pues bien, parto por el principio, ni modo que partir por el final porque eso sería partir por lo que suele ser el final pero que para el caso sería el principio, por ende se seguiría partiendo por el principio como es normal, y no por el final. Bueno lo mejor será partir...

En las siguientes líneas no hay nada _________ _________ (...vieron, no había nada), luego he de plasmar en las siguientes líneas (ahora sí) la verdadera motivación genérica descentralizada yuxtapuesta al saber endógeno de la vida. Una recopilación de datos autobiográficos que reflejan la ignominia procaz de nuestra falaz existencia. No quiero reflejar augurios indómitos de hedonismos baratos, ni menesteres lucubrantes de taciturnos viajes sempiternos por la alameda de lo absurdo. Más bien quiero dar cuenta de que esgrimiendo balbuceos incoherentes cohesionados, se puede hacer ver un texto vacío -como este- en un verosímil eslabón de intelectualidad, barruntando escurios y boleando galimatías solamente aplicando palabras no comunes, tal como lo podría hacer un erudito en la materia. Y yo, sin serlo, soy capaz de escribir todo lo acabas de leer sin decirte nada, absolutamente nada, puesto que todo esto se puede resumir en: “lee lo que viene a continuación”...
El presente manifiesto fue hallado en las Cuevas de Altamira y reeditado por un goliardo medieval del siglo XXI , llegó a nuestras manos hace dos semanas y tras variadas relecturas fue necesario darle también sutiles modificaciones a tan sólo el 99% del texto -la nada misma-, para así adecuarlo a mi estructura ideológica carente de ideologías ideologizadas por los ideólogos. Cuan idiota parecen estos.
El absurdo es absurdo porque hay gente que cree en lo absurdo. Ergo el no creer en el absurdo haría ver todo absurdo. Si todo fuese absurdo se discriminaría a las absurdas. No existirían. Y si nada fuese absurda tampoco nada sería “adsurda”, porque eso equivaldría a estar todo el día sobre las “surdas” y esa creo que por ahora tampoco es mi intención.
Pues bien, lo que nos convoca es l@ absurdo@ y no l@adsurdo@ así que de esta manera vuelvo al tema. La primera vez que se comenzó a hablar de cosas absurdas lo hicieron los Melmaquiános partiendo por la letra A, luego siguió la b, la s, la u, la r, la d, la a, y por último la s... . En fin, así llegamos a la actualidad en que vaya a saber qué carambolas realmente es lo absurdo. Por lo mismo, y como lo plantea Huchen Truchen Menestruchen prefiero intentar dar respuesta a través de una muestra de algo que no es absurdo , algo opuesto, utilizando el siguiente diálogo recogido en un importante baño de la capital, titulado “Sátira a la intelectualidad”:

Isóposodo - Entonces colega, si una mosca tiene millones de ojos y vive y se reproduce y muere en tan poco tiempo. Será que perciben más cosas que nosotros los que nos hacemos llamar humanos . ¿Son más inteligente?

Irritáblix - Su aseveración es correcta estimado colega, la inteligencia esta sujeta a su cabeza y cuídela porque bien sabe que puede convertirse en un proyectil.

Isóposodo - Proyecto? proyectil, si un proyectil no es un trabajo y es sólo una propuesta, ¿se imagina si arrojaran trabajos hechos y no simples proyectiles? Vaya vaya, la tecnología me ha superado nuevamente, al igual que la metafísica y la epistemología que ya están a la altura del bicarbonato y el analgésico

Irritáblix - Discrepo rotundamente. No estoy de acuerdo con esa aseveración. Si fuese así, epistemología sería una palabra seria y no una pose sexual como la empiria lo indica. Además, creo que los carburadores de motos son más eficientes que los hígados de paloma.
Respecto al tema del bicarbonato y el analgésico, numerosas investigaciones han aportado datos valiosísimos al respecto. Uno de ellos podría ser la infumable caña del doctor Mefisto, quien a sus 43 años, se dio ‘un cabezazo en la cabeza’ y quedó impotente de por vida, además de tener que usar una sonda para respirar. Otro hecho notable sobre este asunto, es la fisonomía del pez, tan similar a la de las plumas, como podemos apreciar en "las plumas y peces", de Otto Kuntspetter. Se toca el mismo tema , en "Cabezazos, duda epistemológica y peces plumíferos", de Jürgen Klinsmann.
Sin embargo, sí estoy de acuerdo en algo con vuestro planteamiento. Y ese algo es en lo que se refiere al proyecto. A esto no tengo mayores observaciones, salvo , claro, que las propuestas a veces pueden ser indecentes, como la epistemología y la metafísica, improperios tan grandes como que le digan dialéctico empirista de los annales. A esto se suma que los trabajos hechos tienen un mayor uso que los proyectiles, puesto que cuando falta confort, los llevan al palacio de la moneda.

Isóposodo – Muy bien, pero permítame no estar de acuerdo en un punto “importantísimamente” tangencial referente a sus postulados.

Irritáblix - ¿ah si?, ¿En cuál estimado colega?

Isóposodo - En el que dice relación con que los carburadores de motos son más eficientes que los hígado de paloma.

Irritáblix - (aparte) “este tipo está chyalado”

Isóposodo - Ayer leía el prestigioso diario “Sinprestigio” y en su sección artes y letra pude constatar lo equivocado que está. Según el historiador José Saturnino Cardoso, en el año 1727, en la frontera entre Chile y Bangladesh, un grupo de palomas solteras se dio cita para conmemorar el quincuagésimo <(aparte) que graciosa forma toma la cavidad bucal al esgrimir esa palabra: quincuagésimo...dan arcadas, pero en fin.> aniversario de la muerte del molusco volador. En aquella ocasión el científico alemán "Otto Ketchup-Kuchen", experimentó con ellas agregando varias dosis de vodka ruso de 1834º alcohólicos en los canapés de alpiste que se servirían los miembros de la logia palomera. Los resultados fueron insospechados, ninguna paloma se embriagó ni nada por el estilo. El mismo señor Ketchup-Kuchen analizó los resultados terminada la celebración, y comprobó “fascinantemente” que el hígado de las palomas no presentaba daños en ningún caso, más bien las que estaban dañadas antes de aquel día se compusieron.

Irritáblix - Mire colega, que interesante.

Isóposodo - Así es pues, buen hombre. De esta forma desmitifico su teoría, puesto que el hígado de las palomas fácilmente puede ser más eficiente que un carburador de motos, o acaso si le echa alcohol a su carburador funcionaría...ah?

Irritáblix - Tiene razón , y pasando a otro tema, qué ha pensado en desarrollar para su próxima investigación?

Isóposodo - Olvidé comentárselo. Ya lo tengo suficientemente claro. Investigaré históricamente a modo comparativo la funcionalidad del corchete y del clip.

Irritáblix - Pero que interesante!!! . es un agrado hablar temas tan producentes con usted.

De esta forma creo ejemplificar qué realmente no es absurdo, porque obviamente no lo es ¿cierto?. Así espero que se puedan sacar conclusiones respecto al tema.
Ahora bien, es necesario lo innecesario para hablar de lo necesario respecto a lo necesario, porque de otro modo no podría querer saber qué es lo quiero ó querer no saber lo que sé. Saber que es lo quiero o querer no saber lo que sé es lo más importante a la hora de buscar respuestas a mi duda pletórica respecto a qué es lo absurdo. No obstante tras abundantes palabras incoherentes cohesionadas no he llegado a nada. Es decir, que no llegué a todo. No somos nada, pero tampoco somos todo. Por lo mismo y para terminar, quiero decir que somos tan absurdos como todo lo que puede estar escribiendo este ser humano en el preciso instante en el que pongo el último punto sobre el teclado de mi computador.

Chyalo.